Algo que deberían explicarnos en la escuela antes de salir al mercado laboral es cómo entender una nómina. Resulta sorprendente pero muchos trabajadores no entienden los contenidos de su nómina. La verdad es que nadie se lo explicó. ¡Bienvenido una semana más a Finanzas para Millennials! Hoy os traigo una guía con la entender los puntos clave de un recibo de salario o nómina. ¡Atento que empezamos!
- A mí lo único que me importa es lo que me ingresan en la cuenta.
- Lo que te ingresan en la cuenta está bien. Pero, ¿sabes que se pueden equivocar y por eso hay que revisar los recibos de salario? Además, es realmente importante saber cómo funciona una nómina pues de ello depende en gran medida los impuestos que pagas.
- Acabas de captar toda mi atención.
¿Qué es una nómina?
Antes de profundizar en los detalles, es importante entender qué es
una nómina. Podemos resumir diciendo que una nómina es un documento legal en
que se deja por escrito la relación entre trabajador y empresa y en el que se detallan
los ingresos, deducciones y otros aspectos relacionados con el pago de un trabajador.
Esta información es proporcionada por el empleador (la empresa) al empleado y
se utiliza para calcular el salario neto que recibirá el trabajador después de
impuestos y otras deducciones.
También es importante conocer algunos términos clave, que son básicos antes de empresa en materia.
- Salario bruto: es la cantidad total de dinero que el trabajador gana antes de impuestos y otras deducciones.
- Salario neto: es la cantidad de dinero que el empleado recibe después de impuestos y otras deducciones.
- Seguridad Social: es un sistema social obligatorio que cubre los gastos de atención médica y las pensiones.
- Cotización: es la cantidad de dinero que la empresa paga a la Seguridad Social en nombre del empleado.
- IRPF (Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas): es el impuesto que se aplica al salario del trabajador en función de su nivel de ingresos.
- Retenciones: son las cantidades que se retienen del salario del trabajador para cubrir los impuestos y otras deducciones.
- Pagas extraordinarias: son las pagas que se reciben dos o más veces al año (generalmente en julio y diciembre). Es habitual que estén prorrateadas (repartidas) en la nómina mensual.
Ahora que conocemos estos términos clave, entremos un poco más en materia.
Existen ciertos requisitos legales que deben incluirse en una nómina. Así que comencemos por el principio.
Lo primero que encontraremos en el encabezado de la nómina son los datos informativos de empresa y empleado, como identificadores fiscales (CIF, DNI…), nombres, direcciones, números de afiliación a la seguridad social, día de cobro o categoría laboral. Me paro aquí porque de este punto se obtendrá la remuneración base que marque el convenio colectivo al que se acoja la empresa para tu categoría.
Devengos en tu nómina
El segundo gran apartado que encontrarás son los devengos. ¿Qué son los devengos de una nómina? Los devengos hacen referencia a todos aquellos ingresos que recibe el empleado como retribución a su trabajo; tanto salariales como no salariales. Dentro de la nómina encontraremos varias partidas que incluyen devengos salariales.
- Salario base: Este apartado recoge el salario bruto correspondiente a tu categoría, no puede ser inferior al que marque tu convenio para tu categoría.
- Complementos salariales y pluses: Aquí se reflejan todas las cantidades extraordinarias percibidas por el empleado. Por ejemplo, bonus por objetivos, pluses por peligrosidad, por destino, complementos por negociación salarial por encima de convenio, etc.
- Horas extraordinarias: Si has realizado horas adicionales a tu horario laboral, aparecerán reflejadas en la nómina en este apartado específico y se cobrarán como mínimo en función de lo que marque tu convenio colectivo o según negociación con la empresa.
- Salario en especie: El salario en especie tiene una consideración especial pues puede estar exento total o parcialmente de IRPF, fundamentalmente en función del importe. Aquí se engloban seguros médicos privados, vehículos para uso personal, cheques guardería, etc.
Deducciones en tu nómina
Si los devengos decíamos que suman dinero a la nómina, las deducciones lo restan.
- Esta parte no me gusta, pasamos.
- Sigue leyendo que esta parte es importante.
Contingencias comunes: Pagamos el 4,8% de los devengos salariales sin tener en cuenta las horas extras (que computará aparte). El objetivo de este apartado es pagar las bajas por enfermedad, jubilaciones o incapacidades. Si te fijas, en la parte inferior la nómina, la empresa también paga por este concepto, concretamente un 24,10%.
Formación profesional: Pagamos un 0,10% sobre el total devengado. La empresa puede decidir recuperar este dinero y ofrecer formación subvencionada al empleado. Al igual que el apartado anterior, la empresa también paga, concretamente un 0,6% del salario total.
Desempleo: En este caso pagamos un 1,65%, para como su nombre indica, poder cobrar prestación por desempleo si nos despiden. Al igual que en los apartados anteriores, las empresas también pagan por este concepto, concretamente un 5,5%.
IRPF: Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas. Ese gran apartado que genera tantos cabreos en los trabajadores. El porcentaje es variable y progresivo, es decir, cuanto más ganes más alto será el porcentaje. Variará desde el 0% hasta el 45% en función de los ingresos que percibas. Aquí te dejo una herramienta de la Agencia Tributaria para calcular el porcentaje de IRPF que la empresa debe aplicarte.
Líquido a percibir
En esta parte figura el sueldo neto. Es la cantidad que veremos ingresado en nuestra cuenta. Se calcula restando al total devengado el total de deducciones.
Por último, es importante revisar tu nómina cuidadosamente para asegurarte de que todos los datos sean correctos. Revisa regularmente que el ingreso que percibes en tu cuenta coincide con el que se refleja en tu nómina. Si encuentras algún error o discrepancia, debes notificarlo inmediatamente a tu empresa para que puedan corregirlo.
¡Os veo la semana que viene!
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